Su dedicación a la política, a escala de municipio, entidad básica de la organización territorial del Estado, y cauce inmediato de participación ciudadana en los asuntos públicos, y más recientemente a nivel insular, revela una vocación de servicio público que no le es nada ajena. Viene refrendada por su contribución al ámbito del desarrollo rural insular y su trabajo en la Conservación de especies en peligro, una relevante tarea de salvaguarda de nuestro medio natural.
D. Domingo Guzmán Correa Marichal, biólogo colegiado del COBCAN, trabaja en TRAGSATEC (Tecnologías y Servicios Agrarios, S.A., S.M, M.P.), empresa pública integrada en la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).
Desde el COBCAN queremos agradecerle profundamente que haya dedicado su tiempo a responder a nuestras preguntas, compartiendo su visión, en primera persona, como biólogo, de un mundo tan apasionante como el de la política.
Breve reseña de tu trayectoria como biólogo
He trabajado en el campo del desarrollo rural en la Asociación Insular de Desarrollo Rural de La Gomera, en seguimiento de especies amenazadas y seguimiento ambiental, además de los períodos en los que he tenido competencias como concejal.
¿Por qué decidiste ser biólogo?
Pues por, como dice aquella canción de Silvio Rodríguez, una mezcla de causas y azares: en 3º de BUP, aunque se me daban mejor las letras, escogí ciencias; en COU, huyendo del dibujo técnico, escogí la opción biosanitaria; tras la selectividad, como siempre he sido aprensivo a la sangre, descarté los estudios sanitarios, y entre una cosa y otra, pues Biología. Pero una vez empecé la carrera, cada vez más contento de cómo se fueron dando las causas y los azares.
¿Cuándo decidiste colegiarte? ¿Por qué?
Desde que finalicé la carrera, por convencimiento, y por el trabajo que desarrollaba y sigue desarrollando el Colegio en cuestiones formativas e informativas.
¿Cuáles son tus líneas principales de trabajo?
Ahora mismo, trabajo con especies amenazadas de la flora vascular del Parque Nacional de Garajonay, básicamente con análisis de los censos y seguimientos de las poblaciones.
¿Qué destacarías en la actualidad de tu ámbito de trabajo?
La evidencia de lo imprescindible que es la labor de la gestión de un espacio natural protegido.
En general ¿Qué es lo que te apasiona de tu profesión? ¿Y lo que menos te gusta?
De mi profesión me apasiona todo. Lo que menos me gusta es cierto menosprecio que desde ciertas esferas políticas y económicas hay hacia “lo ambiental”.
¿A qué crees que sería debido este menosprecio, y cómo se podría devolver u otorgar la importancia debida a estas cuestiones ambientales?
Seguro que hay más factores y algún sociólogo o algún politólogo podrían aportar más y mejores enfoques, pero en mi opinión, creo que, por una parte, ese menosprecio viene dado por la poca cultura científica y sensibilidad medioambiental que tiene la ciudadanía en general, y que, por supuesto, tienen y muestran nuestros gobernantes. Y por otra, hay que señalar a los lobbies y grupos de poder que están detrás de muchas de las políticas que se plantean, se imponen y se llevan a cabo, y que van a lo que van: a sacar el máximo rendimiento, incluso aprovechando conceptos, en principio, tan nobles y defendibles como la sostenibilidad, como se ve ahora en la implantación de parques eólicos o fotovoltaicos, en los que hay un dilema y un conflicto claro para quienes somos ambientalistas.
¿Qué le dirías a un recién graduado en Biología? ¿Y a alguien que esté pensando en incorporarse a la política, con ánimos de gestionar cuestiones relacionadas con el Medio Ambiente o la Biología en General?
Que intente seguir formándose y disfrutar y aprender de lo que haga en cada momento. Para quien esté pensando en incorporarse a la política, que nunca olvide para qué toma esa decisión y, sobre todo, para quiénes quiere “gobernar”; por último, que intente aprender de todo lo que haga.
¿Crees que el Colegio Oficial de Biólogos de Canarias podría ayudar a la Gestión de los temas relacionados con la Biología en las Administraciones Públicas? ¿Cómo?
Indudablemente, en cuestiones de asesoramiento y formación a las Administraciones Públicas en temas ambientales, en sostenibilidad y en criterios científicos y técnicos creo que el Colegio puede y debe (o se le debe dejar) ser más protagonista. El cómo, pues entiendo que debe haber figuras y mecanismos (convenios, por ejemplo) que concreten la necesidad que en mi opinión tienen la administraciones públicas en mejorar la cultura científica y ambiental, máxime en el contexto actual de Cambio global y de fondos que precisamente dicen querer ahondar en soluciones ambientales.
Recientemente impartiste un webinar organizado por el COBCAN, titulado Pequeños éxitos y grandes fracasos de un biólogo asomado a la política. En el contexto político actual, en el que se ponen en duda avances científicos muy ligados al mundo de la Biología, como la eficacia de las vacunas, cambio climático, evolución de las especies o la misma forma del planeta, ¿Cuánta importancia tiene la participación del Biólogo en política?
Creo que no solo es importante, sino necesario y vital que los profesionales de las distintas ramas de la Biología y las ciencias en general participemos activamente en política, bien en partidos políticos o bien como militantes en colectivos. Estamos en un contexto sociopolítico donde las mentiras y las falsedades empiezan a ser auténticos paradigmas dogmáticos para algunas fuerzas políticas y para muchas personas, y por eso mismo, se necesita más que nunca la participación de personas que en esos debates aporten datos, evidencias científicas, cultura científica, conceptos ambientales, pensamiento crítico y consciente… Creo que siempre ha sido necesaria la participación política, pero ahora, en este contexto actual, es urgente.
¿Qué esperas del colegio?
Pues que siga por la línea de trabajo que lleva haciendo en los últimos años en los que, en mi opinión, se está haciendo una interesantísima labor de promoción de la profesión de biólogo.
10 cosas sobre… Domingo Guzmán Correa Marichal.
1. Un lugar: La Gomera, sin lugar a dudas y pese a todo lo mal gestionada que está.
2. Una causa perdida: Que los derechos humanos sean para todas las personas y sin cargarnos lo que queda de planeta. Pero no está perdida: hay que ganarla porque no nos queda otra como especie.
3. Un referente de vida: Mis padres, cada uno a su manera.
4. Un/a científico/a: Darwin.
5. Un ser vivo: Mi hija Daniela.
6. Un libro o publicación: Muchos y depende del día y del tema. De repente, ahora: de poesía, Poeta en Nueva York (Federico García Lorca, 1940); de novela, La insoportable levedad del ser (Milan Kundera, 1984); de difusión científica, Armas, gérmenes y acero (Jared Diamond, 1997), y de botánica, por un tema sentimental, Flores Silvestres de las Islas Canarias (Zoë Bramwell y David Bramwell, 1983).
7. Una comida: No tengo un plato predilecto a destacar. Sí una bebida: café.
8. Un deporte: Senderismo.
9. Un hobby: Escribir y leer, y escuchar música descubriendo grupos, artistas, estilos, movimientos…
10. Un reto: Disfrutar más con lo que hago y vivo en cada momento, sin añoranzas ni idealizaciones del pasado, ni tampoco miedos al futuro. Y saber decir más a menudo NO, que mira que me cuesta.
